G8 – CAMPEÓN 36 HORAS 2015
Un año más, y ya son 28, Sabiñánigo se vistió de corto durante la Semana Santa para albergar las 36 Horas de fútbol sala. En esta edición, el equipo G8 se hizo con el título en su tercera final del torneo, derrotando en el partido decisivo a Construcciones Seral Tena, una de las revelaciones de las 36 Horas de 2015.
El balón ya había empezado a rodar el día anterior en las 12 Horas, el torneo destinado a las categorías junior y donde los más jóvenes se preparan para asaltar algún día el título de las 36 Horas. Entre los 25 equipos participantes, los campeones de este año fueron: Jacetano ‘A’ (bejamines), Jacetano ‘B’ (alevines), Aston Birras (infantiles) y Los Magos del Balón (cadetes).
En las 36 Horas de este año participaron 31 conjuntos procedentes de Sabiñánigo, Biescas, Panticosa, Sallent, Yebra de Basa, Jaca, Siresa, Utebo y Barcelona, ofreciendo espectáculo tanto dentro como fuera del terreno de juego. En la fase de grupos vimos partidos de todo tipo, tanto duelos muy igualados que se tuvieron que decidir en los penaltis, como encuentros en los equipos con más ilusión que otra cosa eran barridos con más o menos esfuerzo por los ‘cocos’ del torneo.
Los cabezas de serie (La Sala, Rayo Vallacaño, Carnes Tito y Sallent Fútbol Samba) consiguieron pasar como líderes de sus grupos a octavos de final con relativa facilidad. A ellos les acompañaron M’a Pili, Construcciones Seral Tena, Pirineos, G8, Tiburones del Basa y Cuanto Queda de la Bodega, que también se impusieron en sus respectivos grupos. El cuadro de octavos de final lo completaron G 4+4, Celta de Vino, Quién Juega, Real Cohólicos, Panticosa FC y La Bodega de Pepe, siendo los mejores segundos clasificados en esta primera fase.
En la primera ronda de eliminatorias no hubo cabida para las sorpresas, pese a que sí hubo partidos muy igualados. Así, los cuartos de final los conformaron: Construcciones Seral Tena-Rayo Vallacaño; Pirineos-Sallent Fútbol Samba; La Sala-G8; y Carnes Tito-Tiburones del Basa. El encuentro más desequilibrado fue el que enfrentó al campeón el año anterior y al de esta edición. G8 ya demostró estar muy en forma y le endosó un contundente 6-0 que le colocó en semifinales. Sallent Fútbol Samba hizo lo propio con Pirineos, que se resintió demasiado de las notorias bajas respecto al año anterior, y se impuso por 3-0, aunque lo visto sobre el campo reflejó una mayor igualdad que el marcador .
El finalista de las pasadas 36 Horas, Rayo Vallacaño, tampoco pudo contar con el mejor jugador y máximo goleador del último torneo, Borja Berrendo, y no encontraron forma de batir a Seral Tena. El partido se fue a los penaltis y allí la suerte se decantó por Construcciones Seral Tena, que ya se erigía como una de las sorpresas de la competición. En el choque que cerraba los cuartos de final, Tiburones del Basa se impuso a Carnes Tito por 3-2 en uno de los partidos más locos de la presente edición. Al poco de empezar el partido, Tiburones del Basa marcaba desde su propio campo aprovechando que el portero de Carnes Tito estaba adelantado. A partir de ese momento, los de Yebra se cerraron en su área, pero en uno de los pocos ataques elaborados que realizaron y en un despeje cuando Carnes Tito jugaba con portero jugador, pusieron el marcador 3-0 a su favor. Carnes Tito, dominador del choque, recortó distancias, pero no logró el empate y quedó eliminado.
Las dos semifinales del torneo (Construcciones Seral Tena-Sallent Fútbol Samba y G8-Tiburones del Basa) fueron completamente diferentes. En la primera eliminatoria, los dos equipos salieron con miedo a perder, muy conservadores, lo que provocó que apenas hubo ocasiones claras para ninguno de los dos equipos. Pasaron los minutos y ninguno fue capaz de marcar, por lo que el partido se tuvo que decidir en los penaltis. Como pasara en cuartos, la suerte volvió a sonreír a Construcciones Seral Tena, que se ‘colaba’ en su primera final. La otra semifinal fue un monólogo de G8. Tiburones del Basa se resintió demasiado del esfuerzo acumulado y apenas pudo plantar cara. Uno tras otro fueron cayendo los goles del lado de G8, hasta el definitivo 8-0.
La final enfrentó al mejor ataque y a una de las mejores defensas de la competición. Dos estilos completamente diferentes de juego, pero, como se demostró, ambos muy eficaces. Durante la primera parte la igualdad fue la tónica del juego. G8 dominaba, Seral Tena llevaba peligro a través de contraataques y el marcador no se movía. Sin embargo, en el último minuto de la primera mitad G8 se adelantó dejando un resultado de 1-0 al descanso. La necesidad de empatar hizo que Seral Tena se tuviera que arriesgar más en la segunda parte del encuentro, lo que aprovechó perfectamente G8 para ampliar su ventaja y terminar venciendo por un contundente 5-0, convirtiéndose en el campeón de la XXVIII edición de las 36 Horas de fútbol sala de Sabñánigo, en la tercera final que disputaban.
En cuanto a los trofeos individuales, el equipo campeón, G8, los copó todos: Jorge Muro fue nombrado mejor portero, habiendo recibido tan solo un gol en todas las 36 Horas; Raúl Perul se llevó el trofeo ‘José Antonio Mallada’ al mejor jugador de la competición; mientras que Gonzalo Navarro fue elegido mejor jugador de la final. Por último, Pedro Gil fue el máximo goleador de la vigésimo octava edición de las 36 Horas.
Así quedo la clasificación y los diferentes trofeos de esta XXVII Edición de 36 Horas de Fútbol Sala – Torneo Ciudad de Sabiñánigo:
CAMPEÓN: G8
SUBCAMPEÓN: CONSTRUCCIONES SERAL TENA
TERCERO: SALLENT FUTBOL SAMBA
CUARTO: TIBURONES DEL BASA
QUINTO: RAYO VALLACAÑO
SEXTO: CARNES TITO
SÉPTIMO: PIRINEOS
OCTAVO: LA SALA
EQUIPO REVELACIÓN: CONSTRUCCIONES SERAL TENA
 GONZALO NAVARRO (G8) – MEJOR JUGADOR DE LA FINAL |
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